ALIMENTOS PARA EL CABELLO-ALOPECIA Y CAIDA DEL CABELLO

ALOPECIA Y CAIDA DEL CABELLO

ALIMENTOS PARA EL CABELLO

Una alimentación desequilibrada suele ser también el origen de una pérdida de cabello. Para evitar una calvicie prematura es necesario modificar nuestros hábitos alimenticios. Aunque parezca sorprendente, todo alimento que entra a nuestro organismo tiene una importante repercusión en nuestro cabello.

Los más apropiados son:

Proteínas: Forman la estructura básica del cabello y de toda célula corporal viva. Las mejores proteínas son los huevos, la leche y todos sus derivados. Entre las proteínas vegetales están los cereales (maíz, trigo, kiwicha, quinua y avena) y las legumbres (soya, lentejas, frejoles y arverjas).

Carbohidratos: Constituyen la fuente más común de nuestra energía diaria. Los más adecuados son los cereales integrales y las frutas.

Grasas: Las grasas poliinsaturadas favorecen un cabello sano, pues lubrican el cuero cabelludo y el pelo. Las más recomendadas son los aceites vegetales no refinados de oliva, girasol, ajonjolí, soya y maíz prensados al frío.

Fibra: La mejor fuente de fibra lo constituyen los vegetales y el germen de trigo. Este último puede servirse añadido a los cereales y los zumos, así como incorporarse en los guisos. También se aconsejan los cereales integrales sin refinar, los frejoles, las vainitas frescas, el maíz y la kiwicha.

Se aconseja
- Comer hortalizas frescas y crudas, sino hervidas ligeramente pero no recocidas, pues pierden sus nutrientes.
- Ingerir abundante frutas frescas.
- Beber mínimo ocho vasos de agua diarios.
- Comer ensalada verde una vez al día.
- Comer un huevo dos veces a la semana.
- Tomar leche descremada ya que tiene más calcio, menos grasa y menos calorías.

No se aconseja
- Comer frituras, alimentos procesados o enlatados.
- Consumir abundante mantequilla. Opte por la mantequilla de soya o de ajonjolí.
- Consumir abundante sal ni azúcar. Si puede destierre por completo las golosinas y los carbohidratos refinados (pasteles, bizcochos, etc.)
- Consumir alimentos muy condimentados.
- Comer alimentos picantes.
- Fumar o beber alcohol.